Os dejamos un nuevo Editorial de Javier Gallego, referente a la lucha que están llevando los pensionistas en todo el país, para poder llevar una vida digna y que realmente se merecen. Esperamos que os guste.
Las pensiones no son solo un tema de presente sino que también de futuro ya que todas y todos llegaremos a ser pensionistas y esta lucha es también nuestra.
Han soportado sobre sus hombros un país que se caía. Han levantado a muchas familias durante la crisis y las siguen sacando adelante ahora que el tren de la recuperación se aleja por delante, dejando atrás a una clase trabajadora rota. Le han tapado muchas grietas al sistema, le han hecho mucho trabajo al gobierno y le han evitado muchos conflictos y la recompensa por los servicios prestados es que el PP vaya a por ellos. A por los pensionistas.
No es la primera vez que les tocan las pensiones. Zapatero las congeló en el último año, cuando empezó a vender el estado del bienestar a precio de saldo, aunque en el cómputo de su legislatura las revalorizó en torno al 40%. Rajoy no ha dejado de devaluarlas, con subidas por debajo del coste de la vida, hasta llegar al inaceptable aumento del 0,25% que ha llevado a los jubilados a la calle. Hay un plan detrás de todo esto. Un plan de pensiones privado. El que el gobierno nos quiere endosar.
Además de ejecutores, los populares son ejecutivos de banca. Después de rescatar a los bancos con el dinero de nuestro trabajo, quieren también nuestra jubilación. Son los mismos bancos por los que los mayores han tenido que rescatar a sus familias, los mismos que les robaron a algunos de ellos los ahorros de toda una vida. Pues ahora por boca del gobierno nos dicen que estamos envejeciendo por encima de nuestras posibilidades, que nos muramos ya o vivamos peor. Los argumentos del FMI y el Banco Mundial ahora los repite el Partido Popular. No hay más preguntas, señoría.
Es mentira el mantra de que no hay dinero. Es mentira también el dogma de que las pensiones haya que pagarlas sólo con las cotizaciones del trabajo. Hay muchas otras vías de ingreso. La distribución de la riqueza de todos es una decisión política. Como ha contado el economista Eduardo Garzón, no tienen 2.300 millones para mantener el nivel de las pensiones pero tienen 130.000 para rescatar bancos y autopistas, bonificar a empresarios, comprar de armamento o financiar a la Corona. Hay dinero para lo que se quiere.
Llámalo capitalismo de amiguetes, llámalo neoliberalismo, llámalo socialismo para empresas. Pero no lo llames quiebra del sistema de pensiones porque no cuela. Se podrá mejorar o reformar, pero no está en quiebra, lo quieren quebrar. A los pensionistas no se la han colado. Creía Mariano que tenía cautivo y desarmado el voto de los mayores y se ha encontrado con un ejército rojo de indignación.
No es la primera vez. Los yayoflautas siempre han estado ahí cuando iban a por los demás. Ahora que van a por ellos, tienen que contar con nosotros. Este sábado 17 tenemos la oportunidad de demostrárselo en las manifestaciones que hay en todo el país. Se lo debemos y se lo han ganado. Ya es hora de que puedan disfrutar de los nietos, en lugar de sufrir por ellos. Pero ahí les tenemos, defendiendo sus pensiones que serán también las nuestras si luchamos por ellas. A la vejez, trincheras.
Las mismas trincheras que ocuparon cuando eran jóvenes. Es triste que tengan que seguir peleando como entonces, pero es emocionante que aún tengan fuerzas. Los que más peso han aguantado, han decidido dejar de aguantar. Los jubilados y las mujeres han despertado a la calle y están plantando cara por todos. Se acerca la primavera. Después del mayo del 68, podría llegar el mayo del 18. Ojalá.